BUENOS AIRES.- El árbitro Carlos Maglio aclaró hoy que el encuentro que tuvo con Matías Lammens, presidente de San Lorenzo en la previa del partido ante Rosario Central, fue "casual".
"Me extraña la trascendencia que se le dio. Estas son cosas que suelen ocurrir. Casualmente me encontré con el presidente de San Lorenzo en un bar de Rosario, nos saludó, nos ofreció tomar algo y le dijimos que no para no levantar sospechas, hablamos dos minutos y se retiró", relató Maglio sobre la polémica que se creó por este encuentro.
"Gracias a Dios durante el partido no pasó nada en perjuicio de Central", expresó el árbitro, que además contó que fue respaldado por Miguel Scime, director de formación arbitral de AFA. "A Scime no le gustó, como no me gustó a mí lo que pasó. Me dijo que esté tranquilo y luego del partido nos felicitó porque tuvimos una buena tarde", reveló.
"Por suerte antes del partido pude aclarar todo con el presidente de Central, Norberto Speciale, que justo estaba hablando con el de San Lorenzo", agregó. Maglio, quien retornó a Primera luego de arbitrar en el torneo de la B Nacional, remarcó que para los árbitros ya no es un castigo bajar de categoría.
En cuanto a su futuro, el juez dijo que a mitad del año que viene cumple 50 años y después verá si sigue un tiempo más. "Me encanta el arbitraje pero me molestan este tipo de cosas", concluyó.